La Historia del Blues: Mississippi John Hurt

Continúa desde Skip James

Mississippi John Hurt
Cuando gracias a hombres como H.C. Speir las compañías comprobaron las posibilidades comerciales que ofrecía el Sur, empezaron a enviar a sus propios cazatalentos a la búsqueda de artistas. El hombre designado por el sello OKeh para la tarea fue Thomas Rockwell. En 1928, el violinista blanco Willie Narmour consiguió su primera grabación después de ganar un concurso convocado por el sello. Narmour aprovechó para recomendar a Rockwell al compañero que le había acompañado con la guitarra desde 1923, Mississippi John Hurt. Tras escuchar su canción “Monday Morning Blues”, Rockwell hizo los arreglos necesarios y el 14 de febrero de 1928, Hurt tuvo una primera sesión en Memphis, en la cual el artista no debió de sentirse muy cómodo.


Además de él, en el estudio estaban Rockwell y el ingeniero de sonido. Hicieron sentarse a Hurt en una silla y le acercaron el micrófono a la boca, advirtiéndole que mantuviera la posición y la cabeza completamente quieta mientras cantaba. Más tarde, Hurt recordaría que tuvo el cuello dolorido durante varios días. También que, durante su estancia en Memphis, se había encontrado con artistas de la talla de Blind Lemon Jefferson o Lonnie Johnson, altura que Hurt estaba destinado a alcanzar.

Mississippi John Hurt nació en 1893 y pasó su infancia en Avalon, una pequeña comunidad agrícola, en Mississippi. Huérfano de padre desde los dos años, de niño cogía a escondidas la guitarra de un amigo de su madre hasta que ésta, viendo el interés de su hijo por la música, le regalo una a los nueve años. Aprendió el sólo fijándose en las canciones que interpretaban otros compañeros. En 1915 trabajó en las líneas ferroviarias y, durante la década de 1920, cultivó la tierra como aparcero, complementando sus ingresos con actuaciones en fiestas y bailes locales.


A diferencia de tantos otros, Hurt nunca quiso abandonar su tierra y permaneció en Avalon la mayor parte de su vida, incluso cuando un espectáculo de medicina quiso contratarlo. Desde principios de la década, empezó a trabajar con William Narmour, el violinista que le proporcionaría su primera grabación. De aquella primera sesión, Hurt obtuvo 20 dólares y una segunda oportunidad de grabar, esta vez en Nueva York. Durante la semana que duró su estancia en la ciudad, conoció al guitarrista de Nueva Orleans Lonnie Johnson, con quien mantuvo una intensa colaboración.

Las canciones de Hurt se vendieron relativamente bien, pero el colapso financiero de 1929 y el consecuente parón de la industria discográfica detuvieron su carrera musical. El cierre temporal de OKeh durante la Depresión le llevó de regreso a Avalon y a las labores agrícolas. Al igual que ocurrió con Skip James, no se volvió a saber nada de Mississippi John Hurt hasta 1963, cuando un estudioso de blues llamado Tom Hoskin, le encontró en su ciudad natal y le propuso participar en el Festival Folk de Newport.

La música de Hurt no tenía nada que ver con las vetas de crudeza y pasión que caracterizaban a Charley Patton o a Son House. Hurt buscaba la precisión y el refinamiento, una sensación de control y contención, de tal manera que la delicadeza de su estilo casi parecía oponerse a la tradición del Delta.


La Historia del Blues continua en Alabama, 1930s y Lucille Bogan 

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